Hagamos un cuento

Para escribir cuentos necesitamos saber cómo están hechos por dentro. Empezamos por el principio. Estudiamos como empiezan los cuentos y encontramos distintar fórmulas. Nos fijamos en como acaban. Buscamos cuentos cortos, otros de nunca acabar, cuentos populares, de terror, de animales,... al final encontgramos algo común a todos ellos,... Luego nos atrevemos a hacerlo nosotros, todo ello sin perder la sonrisa. ¿Te atreves?
PARA EMPEZAR
Cuando los animales hablaban...
En cierta ocasión...
En un país lejano...
Érase una vez...
Había una vez...
Hace más de mil años...
Hace mucho tiempo...
PARA ACABAR
...colorín, colorado este cuento se ha acabado, el que no levante el culo se le quedará pegado.
…colorín colorete, por el culo te sale un cohete.
…cuento “contao” por la chimenea se ha “escapao”
...y aquí se acaba este cuento, como me lo contaron te lo cuento.
...y fueron felices y comieron perdices y a mí no me dieron porque no quisieron.
Por supuesto, tú puedes tener nuevas ideas y crear otros finales, insospechados, desconcertantes, sugerentes,... dejar que el final para el lector o empezar por el final y contar el cuento al revés.

PLANTEAMIENTO-NUDO Y DESENLACE.
Los cuentos nos ayudan a sentir emociones y situaciones de forma virtual. Están construidos de forma que se aproximan al mundo de la imagen. Los cuentos los escuchamos y leemos, pero, en realidad, "los vemos" a través de los ojos de la imaginación. Como aprendemos de las experiencias, los cuentos nos aportan experiencias de forma controlada y sin riesgo, por lo que nos ayudan a crecer.
A la hora de escribir, conviene tener en cuenta qué experiencias queremos que vivan los lectores a quienes va dirigido. Mi propuesta está en no incluir cuentos con drama, porque sitúa el dramatismo como algo normal, cotidiano y aceptable en la vida. Entiendo que resulta más positivo crear guiones de búsqueda, crecimiento y resolución de problemas por procedimientos pacíficos.

Laura Otero González - 1º ESO C