1.- Cielo
2.- Mar
3.- Pupila…. etc
Una vez completada tu lista, inventa una pequeña historia utilizando las palabras… verás como tu narración se tiñe del color de tus objetos. Shakespeare sabía muy bien de la utilidad de este recurso y lo usó genialmente en Macbeth, donde todo el universo que rodea al personaje es oscuro… así que inténtalo.